1.700 hombres vigilan fiesta de Amor y Amistad en los municipios del Atlántico
Autoridades hacen llamado a la ciudadanía a celebrar los llamados meses ‘bre’ en sana convivencia.
"Desde septiembre se siente que viene diciembre”, es la frase que más repiten quienes viven en el Caribe colombiano, quizá una de las regiones del país que más anhela que llegue el último mes del año para celebrar en familia.
Sin embargo, los llamados meses que terminan en ‘bre’ (septiembre, octubre, noviembre y diciembre) son una temporada de máxima alerta para las autoridades del Atlántico debido a que aumentan los índices de violencia intrafamiliar, riñas y homicidios.
Yesid Turbay, secretario del Interior del Departamento, el alto consejero para la convivencia, Manuel Díaz, y Susana Cadavid, directora de Tránsito, en visita que realizaron a Zona Cero, enviaron un mensaje de los habitantes del Atlántico para que disfruten de las fiestas de final de año en paz.
Es por esto que como parte de la operatividad, prevención y disuasión, las autoridades emprenden un intenso plan del que hacen parte 1.700 hombres, entre Policía y Ejército, para vigilar cada rincón del departamento.
“Esta es una invitación a celebrar en familia, de tal manera que si van a consumir licor, que lo hagan de manera responsable y evitar al máximo el descontrol de emociones que le genera un tema de indisciplina social, al que se suma el tema de la criminalidad”, declaró Turbay.
Las autoridades recordaron que está disponible las 24 horas la Línea Violeta #702 para atender quejas de violencia contra la mujer y violencia de género, atiende las 24 horas, la 123 de la Policía y la #165 del Gaula.
El plan de seguridad arranca con las fiestas patronales en el municipio de Santo Tomás, que terminan este 16 de septiembre, y empalma con Amor y Amistad el 17.
“Queremos una celebración en paz, que haya cero violencia que prime el respeto por la mujer”, coincidieron.
A su turno, Manuel Díaz, alto consejero para la convivencia, reiteró el llamado al consumo responsable de alcohol.
“Las fiestas son familiares, y cuando uno consume alcohol en exceso, en unos años los niños verán esa conducta como algo normal”, añade.
Invitó a los atlanticenses para que la tolerancia, el respeto y el diálogo sean las herramientas claves para dirimir una diferencia, no el uso de armas de fuego o cortopunzantes y otros elementos.
También pidió a la ciudadanía moderar el volumen de los equipos de sonido, teniendo en cuenta que es uno de los factores que inciden en las discusiones entre vecinos y familiares.
“Hay municipios en donde en una cuadra prenden hasta 3 picós que suenan a todo timbal. Entonces, no disfrutan de la música porque suena a todo timbal como decimos acá. Ese, es uno de los detonantes más graves”.
Puso como ejemplo que en la zona costera como Tubará, Puerto Colombia y Piojó han registrado brotes de alteración del orden público por música por encima de los decibeles permitidos.
“Ocurre que muchas viviendas las están alquilando para eventos que ponen música hasta altas horas de la noche y queman pólvora, lo que está afectando la convivencia”, declaró, tras destacar varias reuniones con líderes de la zona turística y de otros municipios.
La directora del Tránsito del Atlántico, Susana Cadavid, destacó que de acuerdo con la Agencia Nacional de Seguridad Vial, nuestro departamento es el segundo en todo el país con menor índice de accidentalidad por cada 100.000 habitantes.
Dijo que para final de año, una de las prioridades tiene que ver con pedagogía para los usuarios, teniendo en cuenta que el exceso de velocidad es una de las causas más comunes de accidentes junto con la ingesta de licor.
La funcionaria recordó que los conductores que sean sorprendidos en estado de alcoholemia serán sancionados con multas que van desde los 5 millones hasta 20 millones de pesos, dependiendo de cada caso, a lo que se suma la suspensión de la licencia de conducción que puede ir desde un año hasta 10 años.
“Vamos a trabajar en mucha prevención en los municipios durante las fiestas en los municipios que arrancan en septiembre y se extienden hasta diciembre”.
A esto se suman controles en las vías secundarias de las cabeceras municipales y el apoyo de la Policía de Carreteras en las diferentes vías nacionales.
El Tránsito dispondrá de un cuerpo operativo de 70 personas que estarán haciendo acompañamiento en las fiestas de los municipios.